DISEÑO Y USABILIDAD: DIFICULTADES Y VENTAJAS DE SU IMPLEMENTACIÓN

DISEÑO Y USABILIDAD: DIFICULTADES Y VENTAJAS DE SU IMPLEMENTACIÓN

La página web de una empresa debe ser atractiva para el usuario, tanto por su diseño como por su usabilidad. Son dos conceptos que en todos los casos deben ir unidos y que requieren un trabajo serio de planificación a la hora de planificar nuestro sitio en internet. La web es la tarjeta de presentación de cualquier negocio o proyecto y será a través de ella como nos conocerá gran parte del público. Por esta razón es importante que sirva para proyectar una imagen adecuada de nuestro negocio y que nos ayude, además, a incrementar las ventas.

Pero, ¿cómo hacerlo? Pues, en realidad, no es una tarea fácil. Hacen falta conocimientos concretos para poder utilizar todas las herramientas que tenemos a nuestro alcance para diseñar una página web útil y atractiva. Veamos algunos aspectos importantes a tener en cuenta en este proceso creativo.

Diseña tu web al gusto del consumidor.


Esta es, sin duda, la clave: diseñar nuestro sitio web pensando siempre en el usuario y coordinando sus requerimientos con nuestras necesidades.

Por un lado, en el diseño web también hay modas y tendencias. Atrás quedaron los sitios planos, estáticos y aburridos, llenos de textos y con pocas o nulas invitaciones a la conversión. Basta navegar un poco por la red para comprobar que, actualmente, las buenas páginas web están llenas de imágenes, vídeos, colores, animaciones, infografías. El texto debe ser sintético y certero. Y la arquitectura del sitio, muy intuitiva y organizada.

Precisamente por eso, si vamos a crear una nueva web para nuestra empresa o vamos a mejorar la que ya tenemos, es preciso que le dediquemos tiempo y recursos al proyecto. Del resultado dependerá buena parte de nuestras ventas y conversiones. El objetivo es conseguir un sitio moderno, atractivo, funcional y que proporcione al usuario una buena experiencia de navegación. Es decir, debe moverse con facilidad por ella, encontrar fácilmente lo que busca y, si se trata de una tienda virtual, llegar en menos de 2 o 3 clics al carrito de compra.

Superar las dificultades para conseguir tener una web adecuada.


Todo esto que acabamos de explicar es, prácticamente, de sentido común. Pero, a veces, no todos los departamentos de una empresa son capaces de ver la utilidad que una web adecuada puede tener para el negocio. Por ejemplo, la falta de presupuesto suele ser uno de los mayores problemas en el caso de las pymes, los emprendedores o las startups. Pero lo cierto es que se trata de un gasto necesario del que puede depender, en buena medida, el futuro de un negocio. Estamos en la era de internet y de la comunicación digital y, si no estás en la red, no existes. Por lo tanto, ¿por qué escatimar recursos para ello?

En el caso de las empresas grandes, suelen ser los directivos los que priorizan otros aspectos del negocio, en detrimento de su imagen corporativa digital. En este caso, hay que hacerles entender que de ella puede depender el índice de ventas por lo que hay que darle a esta parte la importancia y los recursos que se merece. La idea es hacer una web que resulte rentable.

Si renovamos nuestra página web o creamos una nueva siguiendo patrones de diseño y usabilidad, conseguiremos algunos retos importantes:

Crecer en tráfico y aumentar el número de visitas Incrementar las conversiones y las ventas Fortalecer la imagen de nuestra marca Generar confianza en los consumidores Reducir la tasa de rebote

Claves para crear una web atractiva y rentable.


Para que una página tenga éxito y nos reporte beneficios debe seguir estas claves:

Ser fácil de explorar: bien organizada y jerarquizada. Fácil de navegar e intuitiva. Colocar la información donde el usuario espera encontrarla. Dirigida al usuario: no le expliques quién eres, sino lo que puedes aportarle. Dile que conoces sus necesidades, sus retos, sus necesidades y que estás aquí para ayudarle. Simplificada: haz una página de inicio con poca información. Destaca en ella lo esencial y deja espacios vacíos para no saturar al visitante al primer golpe de vista. Con pocas opciones y muy claras: las llamadas a la acción deben ser pocas y bien diseñadas. Una posibilidad de conversión para resolver un problema específico del usuario. Y colocar los botones en lugares claros y accesibles. Con garantías de seguridad: identifica bien tu empresa, muestra tu afiliación y tu número de seguidores. Implementa pasarelas de pago fiables y seguras.

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