El tratamiento de fotorejuvenecimiento con luz pulsada ayuda a combatir pigmentaciones faciales

El paso del tiempo y la exposición prolongada a los rayos ultravioleta provocan la aparición de pequeñas manchas faciales y una atrofia cutánea que afecta a las capas de la piel como la epidermis, la dermis y el tejido graso subcutáneo. En Marta Aguayo disponen de equipos de última generación para realizar tratamientos faciales en Madrid con tecnología avanzada. El fotorejuvenecimiento facial con luz pulsada (IPL) es en la actualidad uno de los tratamientos más demandados en belleza y medicina estética.

El fotorejuvenecimiento con IPL es un procedimiento diseñado para acabar con las irregularidades y pigmentaciones oscuras de la piel a través de la luz pulsada, es decir, estimula e incentiva la cicatrización y regeneración de la piel con el uso de esta tecnología. La luz pulsada es una fuente lumínica de alta intensidad que actúa como si fuera un bisturí inteligente, eliminando con su aplicación estructuras y lesiones de piel. En Marta Aguayo han apostado por el uso de estos equipos especializados para llevar a cabo uno de los tratamientos faciales en Madrid más efectivos que existe a día de hoy.

El tratamiento con luz pulsada no solo elimina las pigmentaciones faciales, sino que también reduce el tamaño del poro y la profundidad de las arrugas a la vez que sintetiza nuevo colágeno en la dermis. El resultado es una mejora muy notable de la apariencia de la piel gracias al uso de este haz de luz de amplio espectro sobre la capa más profunda de la misma. La duración media de una sesión de rejuvenecimiento facial en el centro de Marta Aguayo es de treinta minutos. Se trata de un procedimiento discreto, rápido y eficaz, ya que no es necesaria la aplicación de anestesia y el paciente puede reincorporarse de inmediato a su rutina diaria. El número ideal de sesiones es de cuatro a seis y los resultados pueden observarse desde el primer momento.

Este procedimiento de rejuvenecimiento facial en Madrid basado en la luz pulsada es completamente seguro. Con el paso de las sesiones comienzan a ser notables los cambios en la fisonomía de la piel, las fibras que la componen, el color y la pigmentación debido a la estimulación de los fibroplastos.

Acudir a un centro especializado como el de Marta Aguayo es fundamental para tener la garantía de la máxima seguridad en el proceso.

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