El verano se acerca y muchos particulares, centros públicos y hoteles empiezan a poner a punto las piscinas exteriores. Para tener la certeza de que todo se hace acorde a las pertinentes medidas de seguridad y de que el agua es 100% apta para el baño, las empresas especializadas en trabajos de limpieza en Ibiza y en el resto del país calientan motores. Recuerdan que optar por una lona para cubrir la piscina es la forma más efectiva de ahorrar tanto agua como energía eléctrica.
Un cobertor para piscinas es una excelente opción también por una cuestión de seguridad. Es por ejemplo la manera de evitar accidentes con niños pequeños y mascotas. Muchas empresas especializadas instalan cerramientos específicos que no les permiten manipularlas ni abrirlas durante el tiempo que las piscinas no estén en uso. En cuanto al ahorro en luz y agua, con las lonas no es necesario calentar tanto en agua con los equipos de climatización, incluso por la noche. Además, el cobertor evita que el agua se evapore y transcurrirá más tiempo antes de tener que reponerla. Una evidente forma de reducir el gasto. Sobre todo en las comunidades autónomas en las que el uso del agua está más limitado e incluso algunos años se prohíbe vaciar la piscina al acabar el verano. En lo relativo al ahorro en productos de limpieza y cloro, una piscina cubierta reduce su uso entre un 35 a un 60%. En consecuencia, además de reducir el gasto, las personas se bañarán en un agua con menos productos químicos con el consiguiente beneficio para la salud. El mercado ofrece la posibilidad de elegir entre muchos modelos de cubiertas para piscinas. Las más demandadas son las cubiertas altas, bajas, desmontables, fijas y telescópicas. En el apartado relacionado con la salud, las empresas especializadas ofrecen cubiertas de piscina con protección UV solar. Esto permite eliminar el nocivo efecto invernadero y el de los rayos solares directos. Por último, las lonas permiten disfrutar de una temporada de baño prolongada. De hecho, pueden mantener el agua hasta 5º grados más caliente que si no hubiera cobertor al evitar las inclemencias climáticas exteriores.